ESTRUCTURA E IMPORTANCIA DEL AGUA EN EL METABOLISMO CELULAR
El agua interviene en casi todas
las reacciones químicas de la célula. La Bioquímica estudia las propiedades y
de las reacciones de los compuestos orgánicos presentes en el organismo. Sin
embargo, no debe olvidarse que en las células vivas la mayor parte de los
compuestos bioquímicos existen y la mayor parte de las reacciones se
desarrollan en un medio acuoso.
El agua es tan familiar para los seres vivos
que generalmente la consideramos como un fluido muy simple, pero las
propiedades físicas y químicas del agua son trascendentes y tienen profundos
significados para la Biología, sus propiedades son muy importantes para el
funcionamiento celular, de hecho están directamente relacionadas con las propiedades
de las biomoléculas y, por tanto, con el metabolismo.
Las estructuras de las macromoléculas que
conforman a los seres vivos son el resultado de las interacciones con el medio
acuoso que las contiene. La combinación de las propiedades del disolvente responsables
de las asociaciones intra e intermoleculares de estas sustancias es
característico del agua; ya que ninguna otra sustancia se asemeja al agua a
este respecto. Por lo anteriormente expuesto, no debe sorprendernos que el agua
sea la sustancia más abundante en los sistemas biológicos, de hecho más del 70%
de los seres vivos está formado por agua.
Propiedades fisicoquímicas del agua y su relación con algunos procesos fisiológicos.
El agua es el único compuesto que
debido a sus propiedades físicas puede ser clasificado aparte de cualquier otro
líquido. Todas estas características están involucradas directamente con la
formación de puentes de hidrógeno, que como ya se comentó anteriormente, son
interacciones moleculares muy débiles pero en conjunto permiten formar
estructuras moleculares muy complejas.
Calor específico: Se define como la cantidad de energía calorífica
necesaria para elevar la temperatura de 1 gramo de sustancia en 1ºC. Para el
agua el valor es de 1cal/g, valor alto en comparación con otros líquidos. Esto
se puede entender como que el agua, absorbe más energía calorífica que la
mayoría de las sustancias. La humedad de los bosques es definitiva para mantener
con menores cambios de temperatura a dicho ecosistema, en comparación con lo
que se observa en los desiertos. En los mamíferos ayuda a mantener la
temperatura homogénea del cuerpo, mediante el bombeo constante de sangre del
corazón hasta los tejidos periféricos, ya que el componente más abundante de la
sangre es el agua.
Tensión
superficial: Es una fuerza de atracción que se manifiesta en la superficie
de un líquido, debido a la atracción que sufren las moléculas de la superficie
hacia el seno del líquido. En un capilar, la capacidad de mojarlo y su fuerza
adhesiva hacen que el agua suba por el capilar y, debido a la tensión
superficial y viscosidad.
Constante dieléctrica: Propiedad de los disolventes de separar
iones de cargas opuestas. El agua tiene uno de los valores de constante
dieléctrica más elevado. El principal efecto como consecuencia de lo anterior,
es que moléculas o partículas cargadas eléctricamente son fácilmente disociadas
en presencia del agua. Esta observación es muy importante para los sistemas
biológicos, pues la diferencia en los gradientes iónicos es la base energética
y funcional de muchos procesos.
Densidad: El agua líquida es más densa
que el hielo a presión y temperatura estándar. Existe un cambio positivo en el
volumen después del congelamiento, lo que ocasiona que el hielo flote. Si el
hielo no flotara, la vida acuática en cuerpos de agua como lagos y en los polos
terrestres, no existiría, pues se congelaría todo el cuerpo hasta la
superficie, de hecho, la capa de hielo se convierte en un aislante térmico. El
agua tiene los más altos puntos de ebullición y de fusión, así como la mayor
viscosidad de todos los hidruros de elementos no metálicos. Como se menciono
anteriormente cada molécula de agua puede formar puentes de hidrógeno con 4
moléculas de agua vecinas que se alcanzan en los cristales de hielo. Las
moléculas de agua continuamente cambian su orientación geométrica y forman
nuevos puentes de hidrógeno con otras moléculas vecinas. Esto sucede cada 10
-12 s.
Agua como disolvente
El
agua tiene una capacidad excepcional de disolver biomoléculas presentes en los
organismos vivos,
puede disolver sustancias iónicas, polares y también las que
no tiene carga, por lo que se le conoce como el disolvente universal. Muchas
biomoléculas sin carga se disuelven fácilmente en agua porque tienen grupos
funcionales polares que forman interacciones dipolo-dipolo favorables. Debido a
que los compuestos iónicos y polares tienen mayor preferencia por las moléculas
de agua, se denominan hidrofílicas. No todos los compuestos que tienen grupos
funcionales polares son solubles en agua, así aquellos que tienen un componente
hidrocarbonato relativamente grande (más de 4 carbonos) son insolubles salvo
que tengan un grupo iónico o varios polares. Las moléculas con grupos capaces
de formar enlaces de hidrógeno tienden a unirse con el agua con este tipo de
enlace, disolviendo fácilmente compuestos hidroxilo, aminas, compuestos
sulfhidrilo, ésteres, cetonas, etc. Los compuestos no polares son insolubles en
agua ya que carecen de iones o grupos funcionales polares, a estos compuestos
se les denomino hidrófobos. Existen otros compuestos de importancia bioquímica,
son iónicos y no polares, estos compuestos son denominadas anfipáticos o
anfifílicos. Las sales metálicas de los ácidos carboxílicos de cadena larga son
ejemplos de este tipo de compuestos.